¿A quién no le gusta irse de spa? ¡Hoy te cuento los beneficios que tiene una sauna!
Los nórdicos ya hace muchos años que lo han instaurado en su día a día, y de hecho es un encuentro social. ¿Realmente conoces sus beneficios? ¡Te los cuento en este blog!
La sauna, tanto la tradicional como la de infrarrojos (un día os hablaré de las propiedades de la luz infrarroja), ofrece muchísimos beneficios, de hecho intenta que tú gimnasio tenga sauna:
- Relajación muscular y aumento de flexibilidad articular: El calor de la sauna ayuda a relajar los músculos y aliviar la tensión de posturas de mucho tiempo delante del ordenador. Esto es beneficioso después del ejercicio intenso o en situaciones de estrés.
- Desintoxicación: La sauna induce la sudoración, lo que ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y limpiar los poros de la piel.
- Mejora de la circulación sanguínea: El calor de la sauna dilata los vasos sanguíneos. Lo que aumenta el flujo sanguíneo y puede mejorar la circulación, lo que es beneficioso para la salud cardiovascular.
- Alivio del dolor: Aliviar el dolor quien padece de artritis y los dolores musculares. El calor puede reducir la sensación de dolor y mejorar la movilidad.
- Mejora de la función pulmonar: Aumentar la expansión de los pulmones y ayudar a aliviar la congestión.
- Reducción del estrés y mejora del sueño
- Pérdida de peso y control del apetito:
Puede ayudar a eliminar temporalmente el exceso de agua del cuerpo y reducir el apetito.
- Piel más saludable: La sudoración en la sauna puede limpiar los poros y mejorar la apariencia general de la piel al eliminar impurezas y células muertas. Intenta frotar levemente con la toalla para limpiar las impurezas de tu piel.
- Mejora del rendimiento atlético.
- Reducción de la presión arterial: Puede ser beneficioso para aquellos con hipertensión leve a moderada.
- Estimulación del sistema inmunológico: La sauna puede aumentar la producción de glóbulos blancos y ayudar al sistema inmunológico a combatir infecciones.
- Mejora de la función cognitiva y memoria.
- Reducción del dolor de cabeza y migraña: Puede ayudar a aliviar el dolor de cabeza y las migrañas al relajar los músculos y aliviar la tensión.
- Desarrollo de resistencia al estrés: La exposición al estrés térmico en la sauna puede ayudar al cuerpo a desarrollar una mayor resistencia al estrés en general.
Y, no menos importante:
- Socialización y relajación social.
La sauna es, a menudo, un lugar donde las personas socializan y se relajan juntas, lo que puede tener beneficios adicionales para la salud mental y emocional, mejora la calidad de vida en personas con enfermedades e inflamaciones crónicas. Para algunas personas con afecciones crónicas como la fibromialgia o la enfermedad de Lyme, la sauna puede proporcionar alivio de los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Es importante escuchar a tu cuerpo y no permanecer en la sauna durante demasiado tiempo, ya que el calor extremo puede ser perjudicial. ¡Tómate una ducha fría y vuelve a entrar un ratito más! Puedes empezar por 5 minutos y vas aumentando según tu ritmo. ¿Te ha parecido interesante esta información?